Quizás las esquinas duermen en la mente,
donde cruzan las calles este sentimiento,
del que llena de ternura el corazón,
que sigue vivo en mi vida.
Quizás no viste el silencio en mi piel,
que sin palabras se quedó por ti,
recordando lo que el pensamiento tiene,
en el corazón, alejando de mí los errores.
Quizás no sé amarte cómo quisieras,
curando heridas falsas en el aire,
que habitan por siempre el alma,
dentro en la verdad del querer.
Quizás nunca te he merecido,
deambulando cerca del corazón,
que sin dejar de amar se olvida…
de esta melodía sin una letra.
Quizás no supe hacer que sintieras,
las emociones que en mí nacen,
siendo los momentos que los ojos engañan,
los que llenan un lugar en el espacio.
Quizás buscaras una escusa,
de querer que no quisiera quererte,
sin dejar que no dejaras amarte,
pero a ti… te sigo queriendo.
Quizás fue culpa mía no verte,
pensar que tu prendiste el vuelo,
sobre otro corazón que lloraba,
por el amor que no compartías.
Quizás has dejado de quererme,
no tengo escusa, ni palabras,
ni defensa de un corazón que siente,
aunque no dejes de perdonarme.
Quizás llegues a pensar que te aparté,
no puedo interrumpir tu pensamiento,
aunque no quieras saber de mí,
yo te sigo queriendo en mi vida.
Quizás de esa estación que nos encontró,
partió el tren que por un instante nos unió,
pero en el no me subí, para que me alejara,
me quedé contigo para el resto de mi vida.
